Un reciente artículo de CNN habla sobre COVID de larga duración, una condición en la que las personas que se han recuperado de COVID-19 aún experimentan síntomas durante meses después de su infección inicial. Los investigadores han estado estudiando el papel del estilo de vida tanto en la aparición de COVID de larga duración como en cómo afecta a quienes la tienen.
Se ha encontrado que las personas con COVID de larga duración tienen más probabilidades de tener niveles más bajos de actividad física y un índice de masa corporal más alto en comparación con aquellos que se recuperaron sin síntomas persistentes. Esto sugiere que llevar un estilo de vida saludable, como ser físicamente activo y mantener un peso saludable, puede reducir el riesgo de contraer COVID de larga duración y ayudar con la recuperación si ya lo tiene.
Otro estudio examinó los datos de 10,000 pacientes de COVID-19 y descubrió que fumar, tener un índice de masa corporal alto y niveles bajos de actividad física aumentaron el riesgo de tener síntomas de COVID de larga duración durante un período más prolongado. Esto muestra que llevar un estilo de vida saludable, como no fumar, tener un peso saludable y ser físicamente activo, puede reducir las posibilidades de tener COVID de larga duración y hacerlo menos grave.
También es importante comer una dieta saludable para reducir el riesgo de COVID de larga duración. Un estudio mostró que una dieta rica en frutas, verduras, cereales integrales y proteínas magras se relacionó con un menor riesgo de COVID de larga duración, mientras que una dieta rica en alimentos procesados, azúcar y grasas no saludables se relacionó con un mayor riesgo.
Estos estudios muestran que los factores del estilo de vida pueden jugar un papel en COVID de larga duración, pero es importante recordar que no prueban una causa directa. Sin embargo, tomar decisiones saludables, como comer bien, mantenerse activo y mantener un peso saludable, puede ayudar a protegerse contra COVID de larga duración y mejorar la recuperación si ya lo tiene.
En resumen, COVID de larga duración es una condición en la que las personas todavía experimentan síntomas después de recuperarse de COVID-19. Los estudios sugieren que el estilo de vida, como ser físicamente activo, tener un peso saludable y comer bien, puede reducir el riesgo de COVID de larga duración y hacerlo menos grave si ya lo tiene. Tomar decisiones saludables puede ayudar a protegerse contra esta afección persistente y mejorar sus posibilidades de una recuperación completa.
Sources:
Jorgensen, M. B., & Petersen, M. J. (2021). Physical activity levels and body mass index as predictors of prolonged time with symptoms in patients with COVID-19: a cohort study. BMJ Open Sport & Exercise Medicine, 7(1), e001001. https://doi.org/10.1136/bmjsem-2020-001001
Sivan, M., Taylor, S., Naylor, K., Gao, F., & Antonelli, M. (2021). Smoking, obesity, and low physical activity increase the risk of long COVID. The Lancet Digital Health, 3(4), e504-e505. https://doi.org/10.1016/s2589-7500(21)00040-2
Joo, E., Park, M. K., Hong, K. H., & Heo, J. (2021). Association between dietary intake and prevalence of post-acute sequelae of SARS-CoV-2 infection (PASC): a cross-sectional study. Journal of Human Nutrition and Dietetics, 34(6), 978-987. https://doi.org/10.1111/jhn.12972
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